Cada 40 segundos ocurre un suicidio

AGENCIAS.- Según datos de la ONU, en el mundo casi mil millones de personas sufren algún trastorno mental. Cada 40 segundos ocurre un suicidio; y actualmente ocurren cerca de 700 mil suicidios al año en el mundo.

En cuanto a México, según un estudio de la OMS, en 2016 nuestro país registraba 5.2 suicidios por cada cien mil habitantes. Esta cifra lo colocaba en la posición 149 a nivel mundial. Por su parte, según datos de la UNAM, en México 15 de cada 100 han padecido depresión.

Sin embargo, desde entonces los números han empezado a empeorar: en 2019, México registró un total de 6 mil 524 suicidios. En cambio, en tan solo en los primeros ocho meses del 2021 se han registrado 6 mil 366 suicidios en nuestro país.

Cualquier observador pensaría que ante el enorme desarrollo de las ciencias médicas, el número de personas con trastornos mentales disminuiría y, sin embargo, parece ascender. ¿Cómo es posible que en un mundo donde existen terapias y medicamentos, tantos pacientes ni siquiera consideren la posibilidad de buscar ayuda?

Por años hemos conceptualizado la salud mental como un fenómeno exclusivo del individuo, al margen de la sociedad y su devenir. Esto ha facilitado que construyamos entornos que invisibilizan o dificultan la atención de sus miembros.

Según datos de la ONU, en países con ingresos bajos o medianos más del 75% de la gente no recibe tratamiento. Esto revela un desfase con respecto a la atención que se pone en la salud física.

Nuestras comunidades y gobiernos, por ejemplo, pueden tener muy claro por qué es importante invertir en la prevención del dengue, la diabetes, el VIH o la tuberculosis.

Algunas de estas enfermedades se previenen con una sola vacuna, otras se tratan con medicamento de por vida. Todas tienen en común que causan estragos en el tejido social cuando no son atendidas, afectan la productividad del país y representan una enorme carga económica para los gobiernos.

La salud mental cumple todos estos puntos antes mencionados, pero no se le trata con la misma importancia. Alrededor de los trastornos mentales hay estigmatización y desdén; no pocas veces se juzga moralmente a quien los padece o se menosprecia la urgencia con que deben atenderse.

De ahí que la OMS haya instituido dos días para promover la importancia de la salud mental y concientizar sobre un problema que parece individual pero cuya solución es necesariamente colectiva.

Desde el año 2003, el 10 de septiembre se conmemora el Día Mundial para la Prevención del Suicidio. Esta fecha se instituyó para combatir el estigma que padecen las personas con trastornos mentales o comportamiento suicida, pues este suele ser uno de los mayores obstáculos en la prevención del suicidio.

Por su parte, el 10 de octubre se celebra el Día Internacional de la Salud Mental. En esta fecha, las acciones están avocadas en subrayar que la salud plena no es posible si no pasa por la salud mental.

A diferencia de otras épocas donde los llamados “malestares del alma” eran un misterio cerrado a nuestro escrutinio, en el siglo XXI se ha conseguido una comprensión inédita de la salud mental. Aunque aún haya mucho camino por recorrer, en ninguna otra época los pacientes tuvieron tantas soluciones posibles a la mano.

Pero, para que estas tengan éxito, es necesario vencer los estigmas, escuchar a aquellos que nos necesitan y comprender que el malestar de uno repercute en todos.

Fuente: Noticieros Televisa

expresionenred

Información general y de interés público, al instante. Denuncias, quejas y sugerencias al inbox, por favor. http://twitter.com/expresionenred

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *